lunes, marzo 31, 2008

Corazón abierto

Los oídos se van cerrando a las palabras, pero no a los ecos.
La boca no emite verbos, solo sustantivos.
Los ojos no miran, solo observan.
Y aún así, seguimos con el corazón abierto, sangrando, latiendo, viviendo.
El optimismo es una extraña situación por la que pasamos sin darnos mucha cuenta, una enfermedad que nunca te envuelve por completo, sino más bien que inunda el corazón y te guía con ojos cerrados por caminos más seguros que los que podemos conocer en toda nuestra vida.
Y es solo por seguir con el corazón abierto, sangrando, latiendo, viviendo que nos contagiamos y vivimos libres desatando amarras que solos nos vamos creando.

No hay comentarios.: